Un ejercicio sencillo que disfrutaras mientras sientes cambios maravillosos y te lo explico acá:
¿Qué vas a conseguir?: enseñar a tu mente a cambiar una conducta usando el movimiento de tus ojos.
Frecuencia: repite el ejercicio al menos dos veces al día.
Tip: Si nunca has asistido a un seminario de PNL, tienes accesos oculares invertidos o eres surd@ puedes pedirme ayuda.
Con esta técnica aprenderás a cambiar conductas no deseadas al enseñarle a tu mente un nuevo camino gracias a la VISUALIZACIÓN y los movimientos de tus ojos. Esta técnica sirve principalmente para cambiar conductas en situaciones específicas. Después de aplicar la técnica varias veces sentirás que se logran cambios con rapidez, ya que es poderosa, es importante que la repitas hasta que la mente adopte la nueva conducta y esté bien establecida.
Algunos ejemplos de conductas sugeridas con esta técnica son:
- Dejar de comer algún alimento específico (pan, galletas, refresco, pastel, café* u otro) *Nunca lo usare para esto.
- Tener más paciencia, tolerancia, seguridad.
- Ser más puntual en los compromisos o los seminarios, jajajaja
Pasos:
1.- Empieza pensando en una escena donde tengas la conducta que deseas cambiar y ubícala en tiempo y espacio, busca una escena donde te comportes “de esa manera” y en ese momento nota los movimientos de tus ojos, que en la mayoría de las personas es hacia arriba y a la izquierda.
Fija bien esta imagen en tu mente. Mantén los ojos arriba a la izquierda con la imagen de la conducta no deseada. Ahora, ¿qué ves en la escena? ¿Qué oyes en esa situación? ¿Qué sientes al ver y escuchar lo que pasa en esta escena específicamente?
2.- Una vez que la imagen esté bien definida, baja la vista a la mano izquierda y allí piensa en un RECURSO para cambiar la conducta no deseada. Lo importante aquí es darte cuenta de lo que necesitas hacer de manera diferente para cambiar la conducta. Quizá requieras, como recurso, disciplina, paciencia, flexibilidad, seguridad, decisión, calma o simplemente decir que NO cuando te ofrecen algo que quieres dejar, como el pastel, café, galletas. Piensa con detenimiento.
3.- Una vez que tengas el recurso necesario, mueve los ojos hacia arriba a la derecha, que es tu parte creativa, y allí repite la escena inicial de la conducta no deseada, sólo que ahora recrea la misma situación, pero empleando tu recurso para cambiarla. Visualízate con las nuevas actitudes gracias al recurso y respira profundamente.
Recrea la escena con la conducta ideal que deseas.
En la escena te ves con todos los RECURSOS necesarios para tener una conducta impecable y cambiar aquella. Vuelve a respirar profundamente.
4.- Por último, baja la vista a la derecha y allí verifica si la nueva sensación es adecuada con el cambio. El cambio que hiciste en la nueva película debe ser bueno para ti. Si es así, regresa a la escena del cambio, donde todo lo haces bien, y revívela, moviendo los ojos arriba a la derecha nuevamente. Si la sensación no es del todo buena, regresa al paso 2 las veces necesarias para buscar algún otro recurso y continúa el ejercicio hasta terminar en el paso 5.
5.- Si te sientes bien con la nueva escena, respira profundamente un par de veces para INTEGRARLA, hacerla tuya en tu mente y en tu cuerpo.
De esta manera le enseñas a tu mente lo que quieres de ahora en adelante. La siguiente vez que se presente la misma situación o una similar, tu mente tendrá un camino nuevo para responder ante el estímulo y así modificarás tu conducta.
Recomendación: repite este ejercicio desde el paso 3 al menos dos veces durante el día.
Te ayudará a potenciar esta nueva ruta en tu mente.